Las siglas de la técnica FUE significan Follicular Unit Extraction (extracción de la unidad folicular) y hoy en día está considerada como la técnica de trasplante capilar más avanzada. Consiste en la introducción en la zona de calvicie, de las unidades foliculares extraídas una a una previamente de otra zona del cuero cabelludo que es resistente a la caída (zona posterior de la cabeza). No queda cicatríz perceptible ya que el diámetro de este tipo de extracción es inferior a un milímetro y tampoco es un procedimiento doloroso porque se realiza bajo anestesia local. El paciente se marcha tras el procedimiento, el mismo día.
Tras la cirugía el pelo trasplantado comienza a crecer entre las 16-20 semanas y permanece el resto de la vida.
Estos injertos del área posterior de la cabeza, están genéticamente programados para crecer toda la vida al poseer receptores hormonales que no se ven afectados por la hiperactividad enzimática de la «5 alfa-reductasa”, por lo que una vez injertados en otras áreas del cuero cabelludo no caen y continúan creciendo siempre con normalidad. Esta enzima es la responsable del paso de testosterona a dihidrotestosterona (DHT) y produce una aceleración de los ciclos capilares que conlleva el agotamiento prematuro de los cabellos.
Existen 3 formas de afrontar el rasurado para realizar el procedimiento:
- Rasurado total: se rasura todo el cuero cabelludo. Es el rasurado de elección.
- Rasurado parcial: se rasura sólo la zona donante, dejando la zona anterior y superior con el mismo aspecto. Esto permite igualar el corte de pelo transcurridos unos días, con lo que el cambio de imagen no es tan radical como en el primer caso.
- Flaps (también llamada técnica NON SHAVE o sin afeitado visible): se rasuran fragmentos de la zona donante, con lo que el pelo largo cae por encima de dichas zonas y lo disimula totalmente. De elección en mujeres.
Como coadyuvante al trasplante capilar se realizan tratamientos anticaída como: PRP (plasma rico en plaquetas), CARBOXITERAPIA o MESOTERAPIA CAPILAR con vitaminas, oligoelementos y aminoácidos, importantes para fortalecer el crecimiento de las nuevas unidades foliculares.