Toxina Botulínica

En la actualidad, la toxina botulínica es parte importante de los tratamientos médico-estéticos de la cara. Desde que comenzó a usarse, forma parte del arsenal de tratamientos no quirúrgicos en medicina estética, mejorando el tratamiento de las líneas y arrugas de expresión. Se utiliza para paralizar temporalmente los músculos que producen estas arrugas, dejando así una piel más lisa. Nos referimos a la toxina botulínica tipo A, que se comercializa en España desde el año 2004 y en la Unión Europea, bajo los nombres comerciales registrados de Botox®, Vistabel®, Dysport®, Azzalure®…

La región ocular es la zona preferente de expresión emocional en las relaciones entre las personas y su aspecto puede alterarse tanto por afecciones generales o locales como por situaciones vitales adversas.

Tratamiento ocular

El paso de los años suele manifestarse primero en los párpados y en la región circundante (región periocular), antes que en el resto de la cara. Con frecuencia, a partir de los 35 años, el problema no queda limitado a los párpados, sino que participa también la región que los rodea en la producción de un aspecto cansado, enfadado o envejecido.

El músculo orbicular, que cierra los párpados, y los músculos que arrugan el entrecejo y la frente van dejando señal de su continua actividad en forma de arrugas de expresión.

Zona tratada con toxina

La toxina botulínica se inyecta directamente en los músculos que se desea relajar. Para ello se debe diluir previamente e inyectar en cada zona a tratar mediante una aguja muy fina. Es útil únicamente para tratar aquellas arrugas fruto de la expresión por contracción muscular, pero no se debe aplicar en aquellas arrugas producidas por la gravedad, ni tampoco en aquellas zonas en que no sería deseable paralizar músculos cuya función es importante.

La toxina no produce un efecto instantáneo sobre los músculos en los que se pretende actuar. Su efecto se comienza a evidenciar hacia los 3-4 días, pudiendo alcanzar un resultado final hasta los 12 días después de la inyección.

Debemos alejarnos de cualquiera que nos ofrezca este tratamiento a bajo coste, pues se trata de un producto farmacéutico de precio elevado. En muchas ocasiones estos tratamientos lo hacen personas inexpertas en condiciones no adecuadas. Infórmate sobre la profesionalidad y el reconocimiento del centro.

Por último, sigue las indicaciones del médico. Si te dice que debes esperar 4 o 6 meses, hazlo. Los motivos son, en primer lugar, que demasiado botox puede hacer que nuestro organismo fabrique anticuerpos para combatir la toxina, y en segundo lugar, el efecto será inmejorable y más natural.

Si tienes más dudas, podemos ayudarte a resolverlas, no dudes en llamarnos.

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